El concepto de “lo humano” en la crítica de las autonomías
En España, una comunidad autónoma es la división política y administrativa de primer nivel, creada de acuerdo con la Constitución española de 1978, con el fin de garantizar una autonomía limitada de las nacionalidades y regiones que la integran[1][2][3].
España no es una federación, sino un país unitario descentralizado[4][5][1] Aunque la soberanía reside en la nación en su conjunto, representada en las instituciones centrales de gobierno, la nación ha transferido, en grados variables, el poder a las comunidades, que, a su vez, ejercen su derecho al autogobierno dentro de los límites establecidos en la Constitución y en sus estatutos de autonomía[1] Cada comunidad tiene su propio conjunto de competencias transferidas; normalmente, las comunidades con un nacionalismo local más fuerte tienen más competencias, y este tipo de transferencia se ha denominado asimétrica. Algunos estudiosos se han referido al sistema resultante como un sistema federal en todo menos en el nombre, o una “federación sin federalismo”[6].
TRABAJO AUTÓNOMO EN ESPAÑA Pagar impuestos, declarar impuestos
El paquete de medidas será útil para apoyar a las empresas y autónomos más afectados por la pandemia. Sin embargo, las ayudas deben llegarles rápidamente ya que es precisamente ahora, antes de que la economía se recupere, cuando nuestro tejido productivo necesita un impulso.
El paquete de ayudas aprobado por el Gobierno español el pasado 12 de marzo consta de tres fondos. El mayor de ellos, dotado con 7.000 millones de euros, está destinado a proporcionar ayudas directas a empresas y autónomos con el fin de socorrer a aquellos que atraviesen problemas de liquidez que puedan convertirse en problemas de solvencia. Para acceder a las ayudas, las empresas tendrán que acreditar descensos de ingresos superiores al 30% en 2020, una condición similar a las que aplican Alemania y Francia en sus paquetes de ayudas, así como demostrar que no han tenido pérdidas en 2019, dos condiciones fácilmente verificables. También deberán estar al corriente de sus obligaciones tributarias y de pago a la Seguridad Social, deberán seguir desarrollando la actividad para la que se concede la ayuda al menos hasta el 30 de junio de 2022 y no se podrán repartir dividendos en 2021 ni en 2022. Hay que tener en cuenta que las ayudas se concederán para fines específicos, es decir, para pagar a proveedores, servicios públicos, salarios, alquileres y arrendamientos o deuda financiera. En primer lugar, se utilizarán para pagar a los proveedores (por orden de antigüedad) y después, en su caso, para reembolsar la deuda garantizada, seguida de la deuda no garantizada.
Conferencia sobre reglamentación de sistemas autónomos marítimos 2021
El contrato de trabajo temporal se formalizará por escrito, podrá ser verbal cuando en la situación de eventual por circunstancias de la producción la duración del mismo sea inferior a cuatro semanas y la jornada completa.
Por su finalidad incentivadora del empleo (fomento del empleo temporal de trabajadores discapacitados en situación de exclusión social, sustitución, jubilación parcial, sustitución por anticipación de la edad de jubilación, trabajadores que tengan acreditada por la administración competente la condición de víctima de violencia de género, doméstica o víctima del terrorismo, trabajadores mayores de cincuenta y dos años perceptores de prestaciones por desempleo y situación de vinculación formativa).
Por su función específica, como sería el caso de impulso a la actividad investigadora (la realización de un proyecto específico de investigación científica y técnica, acceso al Sistema Español de ciencia, tecnología e innovación, personal investigador en formación e investigador doctor o para personal doctor en formación) o el incentivo a la contratación temporal para trabajos subvencionados de interés social/empleo agrario de fomento.
En 10 años, los vehículos autónomos cambiarán todo
En la Comunidad de Madrid hay 107.890 afiliados a la Seguridad Social más que hace un año (+3,7%), lo que deja el número de afiliaciones por encima de los tres millones (3.006.537), un nivel que no se alcanzaba desde julio de 2008. En mayo, el aumento de las afiliaciones fue de 17.094 personas (+0,6%), con lo que ya se ha recuperado el 86,3% del empleo perdido en la crisis. El paro ha bajado en 9.908 personas en la Comunidad en el último mes.
El descenso del paro del 2,5% en la Comunidad de Madrid en el último mes sitúa el número de desempleados registrados en las oficinas de empleo en 387.543 personas, la cifra más baja de los últimos ocho años, según los datos facilitados hoy por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social. En el conjunto de España, el paro bajó en 111.908 personas en el mes de mayo, dejando el número de desempleados en 3.461.128 personas.
En los últimos quince años, el paro había bajado de media en los meses de mayo en 6.416 personas en la región, por lo que la bajada de 9.908 personas confirma la tendencia de mejora en el descenso del paro en la región. Además, ha disminuido en todos los sectores: en Servicios baja en 7.805 personas (-2,6%), en Construcción en 1.384 personas (-3,7%), en Industria en 453 personas (-1,7%) y en Agricultura en 164 personas (-4,4%). El desempleo también disminuyó en todos los niveles de estudios, en todos los grupos profesionales, en todos los grupos de edad y en ambos sexos.