Cuanto cuesta afiliarse a sindicato de confederación intersindical galega
Federación de sindicatos de toda China
Los resultados de las últimas elecciones a representantes de los trabajadores en España, publicados a finales de 2004, confirman el dominio de las confederaciones sindicales CC.OO. y UGT. Es su fuerza electoral la que se considera fuente de legitimidad y representatividad de los sindicatos españoles, más que su afiliación, baja pero estable, en torno al 17% de la población asalariada.
Una de las distinciones básicas para analizar y comparar a los sindicatos españoles en el marco europeo es la que establece entre "representatividad" y "representatividad" el Comité de Libertad Sindical de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que aplica criterios universales para reconocer a los sindicatos, garantizar la democracia y evitar la discriminación sindical. Estos criterios son el número de afiliados, el número de cotizantes y la fuerza en las elecciones de la mano de obra relevante Sin embargo, la OIT reconoce que estos criterios son a veces insuficientes para analizar la situación de cada país. Por ello, sugiere que la representatividad se defina en función de las relaciones institucionales, las condiciones de los interlocutores sociales y la situación socioeconómica. En otras palabras, la representación es diferente de la representatividad.
¿Qué es la afiliación sindical?
Lo esencial de un sindicato: ¿qué es un sindicato? Un sindicato es un grupo de dos o más empleados que se unen para promover intereses comunes, como salarios, prestaciones, horarios y otras condiciones laborales.
¿Cuál es el sector con mayor afiliación sindical?
Datos más destacados de 2022:
Las tasas de sindicación más elevadas se registraron entre los trabajadores en ocupaciones de servicios de protección (34,6 por ciento) y en ocupaciones de educación, formación y bibliotecas (33,7 por ciento). (Véase el cuadro 3.) Los hombres siguieron teniendo una tasa de sindicación más elevada (10,5 por ciento) que las mujeres (9,6 por ciento).
¿Hay que pagar para afiliarse al sindicato?
La legislación federal permite a sindicatos y empresarios firmar acuerdos de "seguridad sindical" que obligan a todos los empleados de una unidad de negociación a afiliarse al sindicato y empezar a pagar las cuotas y cotizaciones sindicales en un plazo de 30 días tras su contratación.
Sindicatos en China
Reportaje fotográfico de la manifestación en Santiago de Compostela, Galicia, Reino de España, el 4 de mayo de 2003, puede verse en la página web de la CIG. En el diaporama, entre las varias fotos con banderas, podemos ver las de: Galicia (versión nacionalista), Confederación Intersindical Galega, Galiza Nova (Galicia Joven, jóvenes nacionalistas), Nunca Máis (bandera de protesta por el accidente del "Prestige"), e incluso una bandera republicana española (sin CdA).
Sí, en las fotos de los pases de diapositivas de la CIG (Confederación de Sindicatos Gallegos) hay muchas banderas de manifestaciones. Pero también podemos ver banderas de la CIG, la mayoría con las letras en amarillo. Sin embargo, el logo-bandera (Galicia+CIG nacionalista) en la web de la CIG) presenta ese dibujo de bandera con las letras en blanco. He intentado reproducir ambos casos, basándome en la observación de las fotos y logotipos de la web de la CIG. La bandera con las letras en blanco parece tener un rojo que no es el habitual "rojo de los sindicatos", [~204:0:51].
Veo también esta bandera con letras en el centro (letras blancas), que se usa mucho, y banderas verticales con inscripción vertical blanca, pero la bandera roja con letras blancas en el cantón creo que es la oficial. Mi hija puede ver tambien esta supuesta bandera oficial la semana pasada en la sede del sindicato, cuando, durante una semana, fue voluntaria para limpiar el fuel-oil (xapapote) en la playa de Carnota, pero no puede obtener confirmacion oficial (nadie que estuviera presente, conoce las normas sobre la bandera, si es que existen).
Federación Sindical Mundial
Pero no podemos quedarnos ahí. Iniciativas como COVAX o C-TAP han fracasado estrepitosamente, no sólo por su insuficiencia, sino sobre todo porque reflejan el fracaso del actual sistema de gobernanza mundial en el que los países ricos y las multinacionales, a menudo en forma de fundaciones, pretenden remodelar el orden mundial a su antojo. La filantropía y las florecientes iniciativas público-privadas no son la respuesta. Menos aún lo son ante los retos globales actuales, en un mundo dominado por Estados e industrias movidas únicamente por las fuerzas del mercado y que buscan el máximo beneficio.
La crisis sanitaria está lejos de resolverse. El sistema capitalista y las políticas neoliberales han estado al timón en todo momento. En la raíz de este virus está la transformación desenfrenada de la relación entre la especie humana y la naturaleza. Las crisis ecológica y sanitaria están íntimamente entrelazadas. La misma lógica neoliberal depredadora ha exacerbado las consecuencias de ambas al aplicar, a las crisis, principios privados y competitivos de política de gestión. El resultado es mucha más desigualdad, mucho más sufrimiento y muchas más muertes en nombre de los intereses de unos pocos privilegiados.
Laboratorio vasco
En una polémica sentencia fechada el 15 de diciembre de 2020 y publicada un mes después, el Tribunal Constitucional español ha rechazado el recurso de un miembro de un sindicato independentista condenado por profanar la bandera española durante una protesta laboral.
Los hechos del caso son sencillos. En el contexto de un conflicto laboral, el denunciante -un representante del sindicato Confederación Intersindical Galega- hizo comentarios públicos menospreciando la bandera española. El conflicto fue incitado por los trabajadores encargados de los servicios de limpieza de una base militar que protestaban por mejores condiciones laborales. Organizaban protestas diarias durante el solemne acto de izado de la bandera nacional española por las mañanas. Un día, mientras los soldados escuchaban el himno nacional, el denunciante gritó: "aquí tenéis el silencio de la puta bandera" y "hay que prender fuego a la puta bandera". Durante los días anteriores, otros trabajadores habían expresado comentarios contra la bandera como "la bandera no paga nuestras facturas", pero nunca fueron procesados por ello.