Partido de los Comunistas de EE.UU.
La Revolución Española fue una revolución social obrera que comenzó al estallar la Guerra Civil española en 1936 y que durante dos o tres años dio lugar a la aplicación generalizada de principios organizativos anarquistas y, más ampliamente, socialistas libertarios en diversas partes del país, principalmente Cataluña, Aragón, Andalucía y partes de la Comunidad Valenciana. Gran parte de la economía española se sometió al control de los trabajadores; en bastiones anarquistas como Cataluña, la cifra alcanzó el 75%. Las fábricas se gestionaron a través de comités de trabajadores, y las zonas agrarias se colectivizaron y gestionaron como comunas socialistas libertarias. Muchas pequeñas empresas, como hoteles, peluquerías y restaurantes, también fueron colectivizadas y gestionadas por sus trabajadores.
La colectivización fue organizada principalmente por las bases de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) y la Federación Anarquista Ibérica (FAI). La socialista Unión General de Trabajadores (UGT) también participó en la implantación de la colectivización.
Solidnet
Este artículo trata sobre los Estados soberanos gobernados por partidos comunistas, normalmente marxistas-leninistas o alguna variante nacional de éstos. Para el movimiento social y la ideología política, véase Comunismo. Para el hipotético escenario social propuesto por la teoría marxista, véase Sociedad comunista. Para una lista de Estados autoproclamados socialistas, véase Lista de Estados socialistas.
Los Estados comunistas son típicamente autoritarios y suelen ser administrados mediante el centralismo democrático por un único aparato centralizado del partido comunista. Estos partidos suelen ser marxista-leninistas o alguna variante nacional de los mismos, como el maoísmo o el titoísmo, con el objetivo oficial de alcanzar el socialismo y progresar hacia una sociedad comunista. Ha habido varios casos de Estados comunistas con procesos de participación política en funcionamiento (por ejemplo, la democracia soviética) en los que intervenían otras organizaciones no partidistas, como la participación democrática directa, los comités de fábrica y los sindicatos, aunque el partido comunista seguía siendo el centro del poder[6][7][8][9][10].
Partido comunista de los pueblos de españa
El Experimento de Cruce Perceptual (PCE) ha sido objeto de estudio durante más de una década, y su objetivo es explicar cómo percibimos, interactuamos y nos entendemos en tiempo real. Además de los estudios con participantes humanos, varios modelos computacionales han investigado cómo los agentes virtuales pueden resolver esta tarea. Sin embargo, el conjunto de opciones de implementación que se ha explorado hasta la fecha es bastante limitado, y el gran número de variables que pueden utilizarse hace muy difícil replicar los resultados. El objetivo principal de este artículo es describir el conjunto de herramientas de simulación de PCE que hemos desarrollado y publicado como repositorio de código abierto en GitHub. Esperamos que este esfuerzo ayude a que los futuros resultados de la simulación PCE sean reproducibles y avance la investigación en la comprensión de los posibles comportamientos en este paradigma experimental. Al final de este artículo, presentamos dos casos de estudio de agentes evolucionados que demuestran cómo la elección de parámetros afecta a las simulaciones.
El Experimento de Cruce Perceptivo (PCE, Perceptual Crossing Experiment), se ha estudiado durante más de una década, y su objetivo es explicar cómo percibimos, interactuamos y nos entendemos en tiempo real. El experimento se inspiró en el estudio de doble proyección de vídeo de Murray y Trevarthen (1985), en el que se observó a bebés cuando interactuaban con un vídeo que mostraba a sus madres en tiempo real frente a una pregrabación de una interacción anterior. El hecho de que los bebés respondieran de forma diferente a estas dos condiciones (mostrándose angustiados en la situación de reproducción) sugiere que la dinámica de la interacción en tiempo real y la contingencia social constituyen una propiedad intrínseca de la percepción social. Aunque todavía no se conocen del todo los mecanismos de este proceso.
Partidos comunistas en Europa
A finales de 1922, el partido contaba con unos 5.000 afiliados[16] El ala izquierda del PCE participó en actos de violencia política, especialmente en Bilbao, dirigidos en gran medida contra otros izquierdistas. Un guardaespaldas del líder del partido disparó y mató a un socialista en noviembre de 1922 y militantes organizados del partido intentaron una huelga general en agosto de 1923 que terminó en un tiroteo en la sede del partido atrincherada, con el resultado de veinte comunistas muertos o heridos y otros setenta detenidos[16].
Sin embargo, Moscú instó a actuar con cautela, y la CNT y los nacionalistas vascos se mostraron reacios a cooperar con los comunistas, por lo que los planes nunca se llevaron a cabo[18] El PCE siguió sufriendo la represión y las disensiones. El segundo secretario general del partido, José Bullejos, purgó el partido de miembros políticamente sospechosos, y él mismo fue arrestado en 1928. En 1930, las discusiones sobre doctrina llevaron a la Federación Comunista Catalano-Balear (FCCB) a separarse del partido y asociarse con la Oposición de Derechas Internacional. En medio de estas luchas internas, el oficial de la Comintern Dmitry Manuilsky declaró que, aunque España tenía “un excelente proletariado”, sólo tenía “algunos grupúsculos, pero no un partido comunista”[19].